Já! Me rio de las líricas y canciones que el Aberno nos tiene. Pues yo ya sé cómo son aquí. La Tierra...

No dije que era malo, sólo divertido...




Les contaré algo particular. Y miren que pasó hace dos siglos. Pero qué particular fue, particular seguirá siendo... pues, yo, sí yo. Voy soñando cuatro días seguidos... cuatro días no con el mismo sueño, sino, con la continuación de éste. ¿Qué pasa en mi mente? o, ¿Es que tengo una historia en mi inconsciente? Cuatro días seguidos, un mismo sueño contínuo... ¿Cuál será el fin? ¿Moriré? ¿Pasará un milagro?... Créanme todos, pues, yo, sí yo denuevo, aún no lo sé. Al final, o mejor dicho, hasta ahora, en éste sueño continuo, todos mis amigos y familiares han muerto. Oh! ¿Qué debo hacer? Vamos sueño, continúa conmigo, sí, conmigo. Que tu fin sólo será el principio de mi nuevo Libro...



Aún te espero en esos valles, donde la neblina nos cubre la mitad del año, donde el cesped siempre tiene esas gotas relucientes, como si los mismísimos duentes vinieran a adornarlo.